Nvidia Sube por la Suspensión de Aranceles

Los mercados se han recuperado rápidamente.

El Nasdaq casi ha borrado sus pérdidas en lo que va de año después de que EE. UU. y China acordaran una pausa temporal de 90 días en los aranceles, reduciendo los derechos en 115 puntos porcentuales. Pero en el fondo, este repunte dice más sobre poder, chips y maniobras geopolíticas que sobre comercio.

Las acciones tecnológicas subieron en general, pero Nvidia destacó — aumentando más de un 10% en dos días. El gigante de los chips de IA volvió a superar brevemente la barrera de los 3 billones de dólares, impulsado por dos factores: el alivio de las tensiones comerciales y la continua oleada de inversiones mundiales en IA. Nvidia no solo se beneficia de la pausa arancelaria, sino que se sitúa en el centro de una carrera mundial por el poder de cómputo.

La compañía también se benefició de la aprobación de EE. UU. para vender chips de IA avanzados a Arabia Saudita, con 18.000 unidades destinadas a una startup local de IA respaldada por el fondo soberano del reino. Es una clara señal de que Washington está flexibilizando selectivamente las restricciones a la exportación, no para China, sino para los aliados con los que espera mantener una estrecha relación.

¿Una Puerta Trasera hacia China?

Los chips vendidos a terceros países, como Arabia Saudita, pueden fácilmente ser redirigidos a China, eludiendo así los controles de exportación estadounidenses. La aplicación de las leyes es notoriamente deficiente, y es casi imposible rastrear por completo la cadena de suministro global de semiconductores.

Si bien esto plantea riesgos para la seguridad nacional, para Nvidia y sus inversores, el acceso indirecto a la demanda china es una zona gris rentable.

Apple También Gana, Silenciosamente

Apple, que advirtió sobre un posible impacto arancelario de 900 millones de dólares a principios de este mes, también se beneficiará de la tregua. Sin embargo, para una empresa de su tamaño, esa cifra es insignificante. La mayor preocupación sigue siendo la exposición a largo plazo a las cadenas de suministro con sede en China — un problema lento y costoso que no se resolverá con una suspensión temporal de los aranceles.

A pesar del repunte a corto plazo, la guerra comercial en general sigue sin resolverse. Los envíos entre EE. UU. y China se han estancado en las últimas semanas, lo que aumenta el temor a una escasez de productos. Las empresas aún enfrentan incertidumbre sobre cuánto tiempo podrán depender de China para obtener componentes críticos, y algunas ya están diversificando sus cadenas de suministro, un proceso costoso y complejo.

En Resumen

Este repunte se centra en quién tiene acceso a los chips de nueva generación, quién controla la infraestructura de IA y cuánto riesgo geopolítico están dispuestos a tolerar los inversores a cambio de crecimiento. Por ahora, Nvidia es el ejemplo perfecto de esta nueva era, donde las zonas grises regulatorias, y no los acuerdos formales, definen el futuro.